lunes, 23 de septiembre de 2013

Don Rafael de la Garnacha

 
En un lugar de la ... Sierra de Gredos, cuyo nombre es Navaluenga, no ha mucho tiempo que he pasado un gran día entre Garnachas.
Y es que allí vive un hidalgo de los que ama su escenario y le pareció convenible y necesario, así para el aumento de su honra, como para el servicio de su región, hacerse bodeguero andante, e irse por todo el mundo dando a conocer las buenas uvas de Garnacha de las que hace mención.
La andadura comenzó en 2003, cuando casi una docena de vecinos, apenados por el abandono de los viñedos de su alrededor, decidieron unirse para salvar al menos algunos de ellos. Con humildad pero con la ambición de llegar a posicionar los vinos de Garnacha de Gredos entre los más reconocidos del mundo.
Diez años después, el sueño ha crecido hasta tener una bodega propia, elaborar 6 tipos de vino 100% Garnacha, y estar presentes en mercados lejanos como Canadá y EEUU.
No sin dificultades, han hecho frente a diversos molinos y hoy están haciendo vinos con alma, de los que se sienten orgullosos. Cada vez conocen mejor sus uvas y como se comportan con el paso del tiempo. Estas garnachas tienen una acidez propia de los 800 m de altitud donde son plantadas y por tanto sus vinos longevos e interesantes. Y tan dignos como los vinos son las personas que les dan vida. Con ellos he pasado un día genial, catando varias añadas de sus vinos, visitando los viñedos y disfrutando de unas patatas revolconas, judías y queso de cabra de Gredos. ¡Qué fermoso maridaje! que diría el hidalgo.
¡Acudid a visitarles! La zona no tiene desperdicio para pasar un buen fin de semana en una casa rural, actividades de aventura, gastronomía y un buen rato en la Garnacha del Alto Alberche.
¡Tienen muchas andanzas que contar!